LA CLAIRE UNDERWOOD REGIOMONTANA
Veintiún días van desde que Samuel y Mariana entraron al poder – menciono a los dos porque son una mancuerna – y de éstos no ha habido casi ninguno en el cual no nos den de que hablar, en especial la Primera Dama de FosFoLeón quien al cortase el cabello en solidaridad con un niño que padece leucemia logró darle un giro inesperado a las críticas que había venido recibiendo desde que compartió a través de sus historias de Instagram contenido personal y sensible de los niños con los que trabaja en el DIF Capullos, así como de la desafortunada invitación a dicho lugar que le hizo a Gloria Trevi –acusada en su momento de trata de menores – y de lo ridícula que se vio al llegar vestida de cenicienta en el Palacio de Gobierno de NL.
Las opiniones y críticas a tal acción no se hicieron esperar, hubo quienes la catalogaron que “wow en veinte días ha realizado todo lo que nunca en NL” y otros que tomaron ese gesto como “una mera estrategia de marketing político cuyo único propósito fue la búsqueda de notoriedad a su persona”, y bueno, la vida y la política no se pueden ver blanco o negro. Muy probablemente ese gesto de solidaridad – que al final del día tuvo y tiene un fin propagandístico –fue premeditado por ella y/o algún asesor para generar empatía y elevar la confianza en ella (porque Mariana un historial de filántropa o solidaria no tiene, sólo basta con recordar cómo en pleno auge de la pandemia, a través de empresas fantasmas, intentó vender insumos médicos de protección a sobreprecio), sin embargo, eso no le quita el hecho de que ese gesto ha sido más efectivo, cálido y significativo que cualquier otra acción respecto al tema de las que han hecho las personas que conforman la autodenominada 4T, donde hay desde un Presidente que califica de “politiquería” el escándalo del desabasto de medicamento para los niños cáncer que ha permeado en todo el tiempo que va del sexenio, una No Primera Dama que le responde a una persona que le cuestiona el tema “No soy médico, a lo mejor usted sí. Ande, ayúdelos”, y una diputada que cree que es falso el desabasto porque en su cuenta de Twitter nadie le mandó evidencia de ello; y querido lector la realidad es que, para efectos de aceptación, la gente prefiere más el teatro de la empatía que el desdén del déspota.
Ahora bien, más allá de que el hecho de que Mariana Rodríguez se haya cortado el cabello – porque no se rapó y que por cierto la estilista que acompañó todo el proceso es dueña de uno de los salones de belleza más exclusivos de Monterrey – haya sido un gesto solidario o una estrategia de marketing, aquí lo preocupante es que la gente que vea en un acto simbólico lo más extraordinario hecho nunca jamás. Sí, fue algo lindo, no obstante, no soluciona el problema de fondo ni nos despeja la interrogante de si ella y el Gobernador tienen algo más que ofrecer que mera mercadotecnia, pues el proyecto de gobierno de Samuel, salvo un par de cosas como el pacto fiscal o una nueva Constitución, es básicamente lo mismo que han propuesto los diferentes actores políticos que han ostentado el cargo en las últimas décadas. ¿Qué hay además del “ponte nuevo, ponte león, ponte nuevo, Nuevo León? ¿Hacia dónde se dirige y por qué su administración será distinta?
Si tú que me estas leyendo has visto la serie de Netflix “House Of Cards” podrás darte cuenta que pareciera que la pareja García Rodríguez quisiera emular un matrimonio muy al estilo de los protagonistas de la serie Frank y Claire Underwood, apareciendo siempre juntos y proyectando una imagen de pareja exitosa y poder. La titular de “Amar a Nuevo León”, tal y como Claire, es una persona pragmática, que proyecta de forma intencionada su imagen y que entiende lo que motiva a las personas para en base en eso plantear su estrategia. Mariana es a Samuel lo que Claire es a Frank, así como lo que en su momento fue Julia Domna al emperador romano Septimio Severo … y bueno ya sabemos quién fue siempre la protagonista de esa historia ¿verdad?
No se olviden que los resultados son los que mandan. Nos vemos el próximo lunes.