EL FIN DEL NEOLIBERALISMO.

Por Carlos Leal.

Chile un pequeño país situado en el sur de América es altamente relevante para la democracia global. En 1970 Salvador Allende logró un triunfo histórico, una coalición de izquierda (integrada por los partidos Socialista, Comunista, Radical, Social Demócrata, MAPU y API) consagra la victoria y desencadena un vuelco hacia el comunismo. Desde los Estados Unidos la CIA organiza un Golpe de Estado, ya que no se podían permitir “dos Cuba” en América Latina. El 11 de septiembre de 1973 representa una fecha trágica no solo para el país andino sino para la humanidad, Augusto Pinochet dirige uno de los Golpes de Estado más sangrientos y mercenarios de la historia moderna de Latinoamérica. 48 años después la historia vuelca su rumbo, nuevamente hacia la izquierda, después de una serie de protestas generalizadas que terminaron por trastocar a la sociedad chilena, Gabriel Boric un joven de apenas 35 años será el nuevo presidente de Chile.

El neoliberalismo es un término que prácticamente lo utilizan los detractores del modelo, pero, se generaliza en la búsqueda de desestatizar las empresas productivas del Estado (suelo, minerales, agua, aire, generación eléctrica, etc.) y aumentar la presencia de privadas en las áreas estratégicas de las naciones. Dicho modelo se instaló con saña en Chile, Milton Freidman y la escuela de Chicago fueron los encargados de delinear los nuevos parámetros económicos que definirían la economía chilena, al día de hoy Chile se convirtió en uno de los países más prósperos y libre económicos de Latinoamérica. Los ingresos de los chilenos aumentaron, la calidad de vida e incluso las libertades individuales, todo esto a cargo de 17 años de dictadura y sangre corriente en las familias andinas.

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El sistema neoliberal viene perdiendo fuerza en Latinoamérica: Mauricio Macri no pudo sostener el poder en Argentina, en México los partidos políticos PRI y PAN están complemente desdibujados de la escena política, Venezuela, Nicaragua, Bolivia y Cuba han consolidado sus sistemas socialistas, Perú se volcó a la izquierda y Colombia un país donde se creía la izquierda no tiene relevancia dicha corriente ha ido sumando adeptos y tiene la posibilidad real de ganar los próximos comicios electorales.

El triunfo de Gabriel Boric viene a sellar la tumba del neoliberalismo, un sistema que colapsó la economía mundial, la sociedad y hoy en pleno siglo XXI ve su ocaso. Al corto plazo el neoliberalismo tiene pocas posibilidades de subsistir, la democracia es su rival número uno y estas no permitirán vuelva el neoliberalismo por la vía del sufragio libre y secreto, si el neoliberalismo vuelve a la vida política de Latinoamérica tendrá que ser como en sus inicios por la vía de la sangre y las armas.