NO ESTÁS SOLO, NO ESTÁS SOLA.

Por Cristal Valenzuela.

Cuando iba en preparatoria me tocó vivir el suicidio de dos compañeras, “suicidio” una palabra que costaba trabajo siquiera pronunciar, un tema del que se tenía muchísimo tabú, recuerdo que nos prohibían hablar de eso, los profesores querían continuar como si nada hubiera pasado.

Fue en la clase de metodología donde nos pidieron hacer un proyecto de investigación sobre cualquier asunto que nos pareciera interesante y como era de esperarse, en efecto, yo elegí centrarlo en el suicidio, aquí había de dos o la profesora me diría que no o me apoyaría en mi proyecto, y si, lo hizo, decidió dejarme hablarlo y exponerlo.

Conforme pasa el tiempo, el tema sigue siendo complicado de digerir, pero también es una gran realidad que se posiciona como la segunda causa de muerte en México y  la cuarta en el mundo. Estados como Guanajuato ha intentado generar leyes buscando la prevención del suicidio, el día viernes en Sinaloa, fue la Diputada Connie Zazueta, quien presentó una iniciativa para que se generen políticas públicas para la “Prevención de la Depresión y el Suicidio”.

En un contexto general, la Diputada Connie comentó “Por todo esto, tenemos un escenario que nos obliga a crear mecanismos y un andamiaje jurídico que coadyuve a cada una de las personas que sufren en silencio”. Como bien lo mencionó, como sociedad estamos “obligados” a crear mecanismos, debemos dejar de hacer caso omiso ante esta situación que afecta cada vez más a la sociedad.

Cuando llegan noticias de que en materia legislativa se busca encontrar soluciones para prevenir el suicidio, es imposible no sentir algún tipo de emoción porque es sin duda alguna  evolución, es comenzar a entender el problema y es generar una empatía con quienes necesitan ayuda.

Hablar de atentar contra tu propia vida jamás será fácil, pero debemos buscar el como si hacerlo para poder tocar el tema sin miedo. Poder identificar a alguien con indicios de depresión puede ser complicado, es importante escuchar, ver comportamientos, pequeñas señales que hacen grandes diferencias, tratar de conocer la depresión y el suicidio, tal y como lo que son, una realidad, sin prejuicio alguno y acudir con profesionales.

Hoy no les escribo como columnista, les escribo desde mi lado más humano, que no desea volver a saber que alguien se sintió tan mal que prefirió morir. NO ESTÁS SOLO, NO ESTÁS SOLA, VAS A ESTAR BIEN, BUSCA AYUDA.