JUSTICIA HASTA LA ETERNIDAD.

Por Cristal Valenzuela.

Es imposible para mi intentar hablar de otro tema que no sea Itzel, que no sea Debanhi, que no sean todas y cada una de las mujeres que desaparecen a diario en este país.

Apenas la semana pasada a plena luz del día a Itzel la privaron de su libertad en el municipio de El Fuerte, horas después la asesinan a martillazos y hay que decirlo así, sin censura alguna, porque es nuestra realidad. Actualmente, las mujeres corremos peligro TODOS LOS DÍAS.

Casi todo el país se conmocionó con el caso de Debanhi por la manera en que se viralizó su fotografía en carretera, sola, exigíamos justicia y entrábamos a twitter con la esperanza de leer noticias positivas acerca de ella.

El pasado jueves las autoridades encontraron su cuerpo dentro de una cisterna cerca de un motel donde se le había visto por última vez, la fiscalía lo llamó como un “accidente” pero honestamente nadie cree que haya sido así.

Ya leíste: TÚ AUSENCIA DUELE.

No puedo entrar en un real contexto sobre lo que realmente pasó porque no lo tengo claro, lo que si tengo claro es qué hay muchísimas inconsistencias, hay muchas cosas que no cuadran, la justicia nos ha fallado tantas veces que nos cuesta trabajo creer todo esto.

Siempre he manifestado que el gobierno no es el principal responsable en casos de violencia a la mujer pero si es responsable de la impunidad que existe actualmente, a las mujeres nos atacan porque el estado no hace nada, es por ello que nos toca salir a la calle a defendernos y a defender a las demás.

Ya no quiero leer mensajes de empatía, tweets, publicaciones en Facebook por parte de nuestras máximas autoridades, ya no quiero que lucren con un tema tan sensible, queremos acciones, queremos que las autoridades nos brinden protección, queremos JUSTICIA.

Me siento enojada, me siento triste, porque ya no soporto ver fichas de búsqueda, porque me duele ver esquelas de mujeres cuya libertad fue robada.

Itzel, Debhani y a todas las que hoy ya no están, quisieron apagar sus voces pero encendieron las de todas las demás, porque mientras la justicia no llegue su nombre sonara por todo lo alto, porque cada vez que se salga a manifestar estarán presentes, no lograron apagar sus luces, las encendieron una eternidad.

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