¿DÓNDE ESTAMOS?

Por Cristal Valenzuela.

La evolución es obligatoria, es definitivamente necesaria, ¿Qué caso tendría hacer lo mismo de siempre? ¿Qué efecto tendría no apostarle a ideas nuevas? Y justo es eso lo que necesita la política mexicana.

Tenemos partidos con más de 50 años de antigüedad y otras más recientes y la antigüedad no quiero que se entienda bajo un término peyorativo, al contrario, la antigüedad es hasta cierto punto equivalente a la experiencia pero la experiencia también necesita innovación.

Los partidos políticos tienen narrativas antiguas y repetitivas, tienen acciones algo viciadas que han venido en decadencia teniendo como secuela la pérdida de credibilidad de la sociedad principalmente de la juventud.

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 La estadística no miente, las pasadas elecciones el padrón juvenil se vio un tanto ausente en la tomas de decisiones democráticas, esto es alarmante siendo la juventud más de 25 millones de votantes, ¿Por qué no estamos ejerciendo nuestro derecho? ¿Por qué estamos dejando el rumbo de un país en manos ajenas?

Es nuestra obligación elegir con responsabilidad a quienes nos estarán representando, sin embargo, seamos honestos, las circunstancias han puesto en descenso nuestra participación y ascenso nuestra apatía, necesitamos tener políticos con credibilidad, necesitamos poder confiar en los perfiles que nos representan, ser escuchados y tomados en cuenta.

La juventud tiene una visión, una percepción muy diferente de política, poseen valores y tendencias ideológicas muy diferentes a las generaciones anteriores y esto se debe a los diversos cambios que ha tenido el país, a que no podemos seguir con ideologías antiguas cuando estamos obligados a generar cambios positivos, es incoherente que los partidos políticos quieran seguir rigiendo un país con estatutos que existen desde 1990 y tantos, sería irracional creer que estamos en las mismas circunstancias.

Necesitamos que las fuerzas políticas pongas en sus agendas la participación juvenil, que nuestra voz de escuche y que se escuche fuerte, que la causa siempre sea tener un mejor México y que la obligación sea de todas y todos. Los jóvenes tenemos ganas pero nos falta espacio.

REDES SOCIALES DE CRISTAL VALENZUELA

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