¡Escándalo internacional! Captan a Raúl Rocha en París entre Miss Universo y el jet set, mientras permanece prófugo de la justicia.

23 Diciembre de 2025.- La escena parece sacada de una película de Hollywood: Raúl Rocha Cantú, copropietario del certamen Miss Universo, fue captado en París, Francia, disfrutando de la vida en el bar del lujoso Hotel Ritz, a pesar de que en México lo buscan por la justicia.

Desde el 15 de diciembre, un juez federal giró una orden de aprehensión en su contra (causa penal 495/2025) por presunta delincuencia organizada y contrabando de hidrocarburos, con investigación de la Fiscalía General de la República (FGR). Además, se le atribuyen vínculos con el tráfico de armas hacia grupos delictivos como el Cártel Jalisco Nueva Generación y La Unión Tepito,

El caso ha evolucionado rápidamente: tras un intento fallido de negociar con las autoridades para ser testigo colaborador —ofreciendo información sobre redes de huachicol a cambio de que se retiraran cargos graves— la suspensión provisional que impedía su captura fue revocada por un tribunal el 22 de diciembre debido a que Rocha no acudió a los citatorios judiciales ni pudo ser localizado en sus domicilios.

Mientras tanto, las imágenes del empresario en una de las capitales más glamorosas del mundo han encendido críticas y dudas. Para muchos sectores de la sociedad —especialmente aquellos que exigen justicia real y un combate serio a la corrupción— resulta inaceptable que alguien con una orden de captura activa por acusaciones tan graves aparezca relajado en París en lugar de responder ante las autoridades mexicanas

De hecho, la FGR considera que Rocha ha eludido sus responsabilidades legales al no presentarse a comparecer, lo cual derivó en que el beneficio de testigo colaborador fuera retirado y ahora se reanude su búsqueda para hacer efectiva la orden de captura

Este caso no solo mezcla farándula y polémica internacional: pone de manifiesto la tensión entre influencia mediática, poder económico y el sistema de justicia mexicano, que enfrenta el reto de hacer cumplir la ley sin importar el estatus social o empresarial de los implicados.